Alegrarnos por ser españoles
Menuda alegría, España, ese gran país, uno de los cuatro o cinco países embrionarios de lo que llamamos la civilización occidental, ha vuelto a ganar de nuevo el Campeonato de Europa, después de ganarlo hace cuatro años y hace dos el Campeonato del Mundo. Que alegría como se han llenado las calles de las ciudades y pueblos a lo largo y ancho de este país, pero, ¿nos hemos preguntado por qué de esta alegría?, pues si lo pensamos todos es muy claro, porque somos españoles y la selección que nos representa a todos ha salido campeona, pero en el fondo porque, de nuevo lo repito, somos españoles. Pues creo que es en este momento después de los fastos por la victoria cuando nos debemos de acordar de las personas que, por ser españoles y un escudo para el resto, hoy no pueden celebrarlo por nosotros. Nuestros soldados, y fuerzas de seguridad del Estado de ahora y de siempre que no pueden celebrarlo porque, por defendernos, han perdido la vida y no pueden estar hoy con nosotros. Desd